Asociación EL TORO de Madrid

2 toros de Palha (1º, 3º) justo de presencia, exigentes con raza y acometividad, pero les falto mas remate. 2 toros de Saltillo (2º, 4º), con cuajo y hondo de presentación, dieron gran juego en varas, pero luego se vinieron muy a menos en el último tercio. 1 sobrero de José Luis Pereda (5ºbis), interesante juego en la muleta, embistiendo con cierta calidad, pero le falto un poco mas de raza y acometividad. 1 sobrero de Torrealta (6º bis), acochinado de presencia, pero muy falto de casta y raza en su comportamiento.

OCTAVIO CHACÓN, de azul turquesa y oro. Silencio y silencio.

PEPE MORAL, de caldero y oro. Saludos y silencio tras aviso.

JOSÉ CARLOS VENEGAS, de fucsia y oro. Vuelta al ruedo y silencio.

Presidente: Víctor Oliver Rodríguez: se lidiaron algunos toros justos de presencia, sobre todo los de la ganadería portuguesa por los cuartos traseros. En el primer de la tarde, se precipito a la hora de cambiar el tercio de varas, no dejándonos disfrutar de una tercera. En el tercero de la tarde, no atendió la petición leve de oreja, después de una gran estocada que le dejo el espada.  

Público: menos de un cuarto de plaza, en tarde soleada y agradable.

1º  10/17 – Camarito – negro mulato – 524kg - 41

El primero puso la emoción en el tercio de varas, derriban al equino en el primer encuentro con los del castoreño encelándose con el en el suelo, al segundo acudió de largo galopando. Pero por motivos que ningún aficionado entendió, no nos dejaron disfrutar de una tercera. En la muleta en mano repetía con mucha raza y acometividad, pero había que poderle y someterlo mucho por bajo, sino protestaba tirando feos derrotes. Había que hacerle muy bien las cosas, en los terrenos adecuados y eso no sucedió.

2º 12/17 – Asturdero – cárdeno de capa – 532kg – 37

Fue emocionante como se arranco de largo galopando en los tres puyazos que le dejaron, el tercero de ellos desde los medios del coso, luego en el pero arreo y cumplió bastante.  Pero este juego en el primer tercio, lo acuso al final, ya que llego a la muleta con bondad y calidad pero totalmente nulo de celo y acometividad. Aparte de perder en numerosas ocasiones las manos, a la mínima que se obligaba en su viaje.

3º 10/17 – Sardinero – negro mulato bragado lucero – 502kg - 63

Vimos tres encuentros, pero con un poco de desorden, no poniéndole bien en suerte. En banderillas apretó mucho a las tablas, sobre todo en el primer par. Y en las dos primeras series con la mano derecha en el tercio, la res repetía con bastante raza y fiereza, ante los que no lo terminaron de someter. Lástima que luego se viniera un poco a menos, comenzando a realizar amagos de marcharse a los terrenos de tablas, donde acabo aculado.

4º 11/17 – Perecito – cárdeno coletero – 560kg – 25

El animal recibió una ovación al salir de los chiqueros, por su cuajo y hondura. En varas, solo vimos dos encuentros, con un animal abanto y muy a su aire. En el último tercio la mano no tenía mucho dentro, viniéndose muy pronto a menos, parándose y aplomándose. Le falto mucha más raza y acometividad, aparte de rajarse los terrenos de tablas.

SOB. 10/16 – Costurero – negro listón salpicado – 620kg - 82

Animal serio de pitones. Recibió dos puyazos, en el segundo de ellos arrancándose de largo, pero en el peto no se termino de emplear del todo. Ya con la muleta en mano, la res tuvo un buen comportamiento embistiendo con calidad y bondad, repitiendo en sus embestidas por ambos pitones. Pero no transmitía mucho a los tendidos, ya que le faltaba algo más de raza y acometividad.

SOB. 10/16 – Manchego – colorado chorreado verdugo – 538kg – 42

La res en los dos puyazos que recibió, fue puesta de largo, pero no realizo nada a destacar en sus peleas en el peto. En la muleta la res no se empleo en ningún momento, sin terminar de romper. Aparte de estar muy justo de fuerzas, perdiendo en varias ocasiones las manos. Le falto muchísima más casta y raza.

Para todos los “aficionados” el mes de septiembre ya esta apuntado en el calendario, como el de los desafíos toristas, en el coso venteño. Cosa que no se refleja en la taquilla, ya que la entrada que registraba hoy, no llegaba ni al cuarto de entrada. ¿Os imagináis, este cartel, con los precios de las entradas que hay en la Feria de Otoño?, yo prefiero no pensarlo.

Se producía el regreso de la ganadería portuguesa de Palha, si no tenemos en cuenta el animal suelto de la encerrona del Domingo de Ramos de este año. Llevábamos varios años sin verla, desde otro desafío con tres animales en el año 2017, muchos años de espera para el cariño que le tenemos por aquí. Se batía en duelo, al hierro de Saltillo, que ya le vimos en otro desafío en el mes de abril en este mismo coso y en julio su novillada tuvo que ser remendada con tres animales de Ricardo Gallardo. Pero por unas circunstancias u otras, ningún de los dos resulto vencedor, ni sacaron el toro completo que todos esperamos de ellos. A la postre, el animal que saco mejor juego fue el sobrero de José Luis Pereda, ¡Quien se lo podía imaginar al inicio del festejo!.

Con el que abría plaza Octavio Chacón, no le dejo lucirse en los lances de recibo de capa. En el tercio de varas, vimos un espectáculo emocionante, cuando derribo al caballo en la primera vara y en la segunda se arranco de largo galopando. De manera incomprensible, no nos dejaron disfrutar de un segundo encuentro. En el último tercio, el diestro andaluz no lo vio claro en ningún momento, en ocasiones un poco a merced de él. La res repetía con mucha raza y acometividad, pero había que poderle y someterlo mucho por bajo, sino te desbordaba. Aparte no sé por qué no se lo saco mas a los medios del animal, pero en el tercio donde desarrollo la faena ya le estaba pensando mucho. Lo mato en la suerte natural donde le dejo una estocada casi entera desprendida de colocación. Y el animal se marcho al desolladero con los trofeos puestos, ya que su oponente no quiso dar el paso para adelante.

En el cuarto de la tarde, un autentico pavo de Saltillo, con muchísimo cuajo que recibió una gran ovación a su salida. En los primeros tercios, no tuvo mucha fijeza, teniéndole que tapar la salida en la primera vara. En el último tercio la res se vino muy a menos, parándose y aplomándose. Octavio lo estuvo llevando a media altura, dándole salida para afuera y colocado al hilo del pitón. La res tenía el defecto de salir distraído, con la cara a media altura. Incluso se termino rajando a los terrenos de tablas. Lo mato en la suerte contraria donde le dejo un pinchazo y una media estocada trasera de colocación, se termino echando en tablas frente al tendido 4.

Muy bien el espada sevillano Pepe Moral luciendo al animal frente a los del castoreño, colocándole muy de largo, lo que hizo vibrar a algunos aficionados. Pero ahí se desfondo muchísimo y llego al último tercio muy justo de todo. Ante un animal que embestía con bondad y calidad, pero con nulo celo y acometividad. Pepe lo estuvo llevando con templanza, sobre todo en dos series al natural, pero siempre cuidándolo muchísimo, ya que a la mínima claudicaba perdiendo las manos. Los naturales eran templados, pero siempre dándole salida para afuera y colocado muy al hilo del pitón, por lo que la transmisión con los tendidos eran muy complicado. Lo mato en la suerte contraria en el tercio, donde le dejo un pinchazo y una estocada entera un poco trasera de colocación, con la res desarmándole la franela.

El quinto de la tarde, el anunciado inicialmente de la portuguesa de Palha, fue devuelto a los chiqueros, por su justeza de fuerzas, cuando al salir del primer puyazo se derrumbo por completo, el presidente saco el pañuelo verde. El sobrero de Pereda muy serio de pitones. Al ponerlo en el primer puyazo, se lucio el espada llevándolo en un galleo con tres chicolinas, rematado con una media verónica, en el segundo de ellos fue puesta de largo pero en el peto no se empleo del todo. En la muleta Pepe ante un animal que embestía con calidad y bondad, pero sin romper del todo. Lo estuvo llevando a media altura, sin bajarle del todo la mano y dándole salida para afuera, sin ceñírselo en ningún momento. A pesar de que el animal tuvo algunas arrancadas buenas, no termino de conectar con los tendidos, ya que a los muletazos les faltaba mucha más profundidad y hondura. Lo mato en la suerte contraria sobre le dejo un pinchazo y una media estocada trasera de colocación, se aculo en tablas y lo remato con dos descabellos.

Completaba el cartel José Carlos Venegas. No se acoplo en los lances de recibo con el capote, ya que repetía con raza y acometividad, se lo saco rápido a los medios lidiando. En el tercio de varas, hubo un poco de desorden y en ocasiones se desentendió un poco, dejándoselo todo a sus rehileteros. Se produjeron tres encuentros con los del castoreño, no todos en sitios acertados, que provocaron que el animal sangrara mucho. Ya con la muleta en mano, comenzó brindando el animal al público. En las dos primeras series con la mano derecha en el tercio del tendido 8, la res arreaba con mucha raza y fiereza. Venegas en estos primeros compases,  estuvo aguanto ese comportamiento, pero acompañando las embestidas sin ningún tipo de poder ni mando.   Pero cuando se disponía a dar una tercera, comenzó con claras miradas a los terrenos de tablas, aparte de venirse a menos, costándole más tomar los engaños y protestando tirando derrotes. Lo mato en la suerte contraria de una gran estocada entera en lo alto, que provoco que el animal cayera sin puntilla. Hubo una leve petición de oreja, sobre todo por la forma con la que acabo con su oponente. Luego cuando vengan las figuras regalaran los apéndices, con los aceros puestos en cualquier lado menos donde debe ser.

Con el que cerraba plaza, de Saltillo, el animal fue devuelta a los chiqueros, ya que al salir del primer encuentro con los del castoreño, el animal se descoordino de los cuartos traseros. En el caballo, fue puesta de largo en ambos puyazos, pero la res no realizo una pelea a destacar. En la muleta el toro no rompió nunca del todo en sus embestidas, aparte de no estar sobrado de fuerzas. Venegas en las series que le propino por ambos pitones, se tuvo que limitar a llevarlo a media altura, sin bajarle del todo la mano y colocado al hilo del pitón. Solo se pudo lucir al final con cinco ayudados por alto con la espada, pero su oponente ya no transmitía nada y lo remato con un pase de pecho y otro del desprecio. En esta animal no estuvo tan acertó con los aceros, le dejo en la suerte contraria dos pinchazos en lo alto y en la suerte natural le dejo un pinchazo y una estocada entera trasera de colocación.

Se deben mejorar muchas cosas, por parte de todos, para que estos interesantes festejos no pierdan interés. Si los aficionados demostramos interés por ellos, es por ver animales encastados de ganaderías mal catalogadas como “toristas”, lucimiento de la suerte de varas, demostración de buenas lidias y toreros que se sobrepongan a la bravura de sus oponentes. Para ver todo esto, todavía nos queda bastante.