Estamos a pocos días de que se celebre el debate sobre el estado de la Nación, y a lo mejor seria conveniente plantearse un debate sobre el estado de la FIESTA. Que está pasando que en todos los ámbitos que tienen que ver la Fiesta de los Toros, parece que se ha perdido el norte y el sur, los toreros que triunfan no torean ni recogiendo sustituciones, en las ferias denominadas toristas, sale un toro cada vez más impresentable, los percances que sufren los toreros parecen más importantes, dependiendo de quien y como los sufren, las empresas buscan únicamente el mercantilismo, el beneficio y el quedar bien con el poder taurino, y los ultimo los medios de comunicación, salvo mínimas excepciones han entrado en una mecánica de hablar de la parte menos importante de esta fiesta. Por ejemplo, como se entiende que Fernando Robleño, triunfador en Madrid antes de la Feria de San Isidro, y que entro sustituyendo a Antonio Ferrera y ratificó su triunfo anterior, no haya entrado en ninguna sustitución de las que han dejado, Joselito, Ponce, Tomás, Rivera Ordóñez, Ferrera, etc., y sin embargo toreros como Finito, Morante, Puerto, Caballero, si han incrementado su numero de contratos a través de las sustituciones (yo creo que por mercantilismo). Como se puede lidiar una corrida tan impresentable como la de Santiago Domecq, ayer 9 de julio en Pamplona. Y quien entiende, que en programas de televisión y radio, que nada tienen que ver con esta fiesta, se hable de algunos percances que sufren los toreros y se ignoren otros, y los medios especializados, los poquitos que se emiten, se dediquen a hacer comentarios lejanos a la realidad. Sirva de ejemplo un programa de una TV Local, donde se lleva a un matador de toros, triunfador el pasado año en Madrid, que recibe un cornalón, del que nadie habla, en la Feria de Otoño, y al que no ponen en San Isidro, pero si el domingo anterior, y encima le intentan convencer de lo bien que le ha tratado la Empresa Toresma y del maravilloso futuro que le espera esta temporada. En las ferias denominadas toristas, sale un toro cada vez más impresentable, los percances que sufren los toreros parecen más importantes, dependiendo de quien y como los sufren. Se intenta justificar lo bien que esta, financieramente hablando, comparando los honorarios de los toreros, con los de los cantantes de moda, que los comparen con los de los futbolistas extranjeros que vienen a la liga española. En fin esta es la situación actual de la fiesta, pero no se dan cuenta que quitando las Ferias de San Isidro y San Fermín, benditos santos, salvo contadas excepciones, las plazas no están pasando de medias entradas o menos, y todo tiene un limite. Tal vez sea el momento de debatir sobre el estado de la Fiesta, y no de si se paga por torear, o se afeita, o se manipula, que eso ya lo sabemos todos, y realizando un debate serio, con personas serias (aficionados, empresarios, apoderados, toreros, periodistas especializados, etc.) que seguro que los hay, se mejore este fantástico espectáculo. Salud y que Dios reparta suerte. Nota: Mencionar con todo el respeto que puede tener un aficionado a cualquier torero, la triste noticia de la muerte de José Tomás Reina Rincón, que se tuvo que ir muy lejos a intentar demostrar que era un TORERO, descanse en paz.