DETALLES DEL FESTEJO
Plaza de Toros Las Ventas
Novillada con Picadores. Novillos de Santa Teresa (antas Félix Hernández Barrera) procedencia Luis Gamero Cívico y Juan Guardiola Soto. Bien presentados, serios, con volumen y trapío suficiente para esta Plaza. Comportamiento variado, complicado y sin lucimiento viniéndose todos a menos, destacó el 3º. Un cuarto de entrada en tarde noche agradable. El peso medio de la novillada según la tablilla mentirosa fue de 502 kg.
Borja Álvarez. Media estocada desprendida SILENCIO. Estocada entera. SILENCIO. Manuel Ponce. Dos pinchazos, media estocada desprendida Aviso. SILENCIO. Resultó herido, pasó a la enfermería. Rafael González. Estocada entera OREJA. Pinchazo, media estocada y descabello. SILENCIO.
Presidencia: Jesús María Gómez Martín, sin complicaciones. Suerte de varas y cuadrillas.: Nada que destacar, en los primeros tercios ni novillos ni actuantes se lucieron. Un puro trámite ambos tercios, una pena. Parte facultativo de Manuel Ponce: “Contusión cervical y encara externa muslo derecho. Puntazos corridos en cuello y espina iliaca anterosuperior derecha. Pronóstico reservado pendiente de estudio radiológico que le impide seguir la lidia. Se traslada al Hospital San Francisco de Asís”. Firmado: Dr. Máximo García Padrós. Nota: datos cogidos de www.las-ventas.com
Hoy era un día marcado por los aficionados amantes del Toro y de su variedad de encastes. Cuando vimos anunciados la ganadería de Santa Teresa nos hizo mucha ilusión. De origen Gamero Cívico y de la línea Guardiola Soto, es la única que la conserva en pureza no como otras que tuvieron su sangre y acabaron con sementales de otras sangres más suaves. Esta ganadería paso por manos de la familia Guardiola, y se mantuvo después en manos de Félix Hernández Barrera, siendo muy habitual en la plaza de toros de Las Ventas, tanto en corridas y novilladas e incluso con bastantes animales sueltos como sobreros. Con trapío y emocionantes embestidas, siempre ha sido del gusto del público torista. El juego no fue el deseado pues los novillos con sus complicaciones tuvieron dos cosas en común; se quedaban cortos y que fueron apagándose poco a poco, impidiendo el disfrute de sus embestidas a los espadas y a los ansiosos aficionados. Rafael González paseó una oreja del tercero. Era el novillo de su presentación en Las Ventas. También debutaba Manuel Ponce que fue cogido en el quinto de la tarde y fue trasladado al hospital, sin cornada pero pendiente de estudio radiológico. Abría la terna Borja Álvarez que pechó con un novillo peligroso en primer lugar. No fue fácil el novillo que salió frío y con querencia hacia toriles. Quito con chicuelinas Ponce y en banderillas arrolló a García-Seco sin consecuencias. En la muleta, difícil, Borja intentó tirar de él y perderles pasos porque el animal se quedaba corto. El cuarto lo arrolló con el capote varios metros y lo levantó del sueldo. Luego con la muleta tuvo mayor nobleza pero escasas opciones pues la res transmitía poco y se quedaba corta y sin humillar. El joven novillero lo intento metiéndose en los terrenos del animal pero eso no caló. En segundo lugar un debutante, Manuel Ponce, vistió la faena de su presentación con alardes. Posee un concepto menos vertical y finalizó con bernadinas sin ayuda. El quinto, el animal más agresivo del envío, lo cogió durante la labor de muleta y fue trasladado a la enfermería con contusiones y puntazos corridos, pendientes de estudio. Pasaportó al animal Borja Álvarez. Cerraba el cartel otro debutante, Rafael González quien demostró temple ya en el quite al segundo de la noche. Continuó con esa despaciosidad con el tercero, un novillo noble y que se desplazó con una embestida algo rebrincada pero manejable. Instrumentó muletazos de trazo largo. Un concepto clásico y natural que tuvo la rúbrica de una gran estocada que desencadenó la petición de la oreja que paseó. Con el sexto que se vino por dentro inició la faena de rodillas en el tercio y fue arrollado sin consecuencias. Volvió a dejar algún derechazo notable y tras dos pinchazos, otro estoconazo que necesitó de descabello.