La II edición de Foro Bravo organizada por la empresa Entre Artes, se celebró el pasado día 2 de Febrero 2013 en el Teatro Bretón de Sepúlveda (Segovia) con la colaboración de la Asociación Cultural Taurina “Amigos de Víctor Barrio”. Tuve la oportunidad de participar en el mismo como aficionado y como representante de la Asociación El Toro de Madrid y como he visto con sorpresa en algunos medios que de mi intervención sólo se han publicado informaciones incompletas que no se ajustan a la totalidad de mis comentarios, me veo obligado a precisar a modo de resumen lo que en realidad fue mi aportación en dicho acto. En primer lugar agradecí que se contara con la afición, puesto que somos el sector más cumplidor y responsable ya que sostenemos con nuestro dinero este espectáculo y por ello debemos exigir que se cumpla el reglamento y se defienda tanto su integridad como, sobre todo, de su máximo protagonista que es el Toro. Desde mi punto de vista señalé que existen desgraciadamente dos tipos de Fiesta, una la del TRIUNFALISMO, en la que todo vale sin ningún tipo de criterio, y que sólo da importancia a cortar muchas orejas y otra la que defiende la INTEGRIDAD, donde nos situamos los aficionados que denunciado el Fraude y exigiendo los valores primordiales y auténticos que deben mantenerse en la Fiesta. Recordé que los toros es un espectáculo de emoción, no de diversión. A los toros los aficionados debemos ir a examinar en primer lugar al toro: su integridad, casta y fuerza; el discurrir de la lidia, la capacidad de los toreros y la calidad de sus lances debiendo juzgar a cada uno con un criterio mínimo de exigencia. Resalté que se debe ser contrario a la indiferencia y al silencio permanente, pues creo que manteniendo esa actitud se colabora con el fraude. Señalé como el principal problema de la fiesta en la actualidad y del vacío de las plazas, es a mi modo de ver, la pérdida de la casta de su principal protagonista, EL TORO. Y al perder la emoción la gente no va a las plazas porque se aburre. Se está abusando de que por cualquier plaza, ya incluso en Las Ventas, en muchos casos salga el medio-toro, un animal lisiado que produce lástima ver sus escasas defensas. También denuncié toda manipulación que se haga a las reses y critiqué la poca voluntad y escaso interés de muchos ganaderos por buscar la condición indispensable que debe tener un toro, la CASTA. Así mismo argumenté que en la actualidad hay tres tipos de toros cuando no debería ser así: uno el que compra el empresario al menor coste posible, otro el deseado por el ganadero y torero coincidiendo en buscar el toro tonto, soso, noblote y “colaborador” para el torero; y por último, el toro que queremos gran parte de la afición que es el toro íntegro, con fuerza, trapío y casta para que un torero de verdad pueda demostrar su valía. Poder y someter al toro, no apuntándose a la moda del animal que colabora con el matador. Mencioné que se está perdiendo la importancia de la lidia, pues el toreo es mucho más que sólo la faena de muleta; hay muchas suertes de capa que están en desuso y desgraciadamente no se ejecutan. Por supuesto subrayé la poca importancia que se presta a la suerte de varas, el tercio donde de verdad se deben apreciar las condiciones del toro y que cuando se ejecuta correctamente, es junto con el último tercio lo más bello de la lidia. Igualmente señalé la falta de compromiso de las ”figuritas” actuales, siempre en los mismos carteles y con los mismos compañeros cerrando las puertas a los que se asoman, matando camadas enteras de las mismas ganaderías y llevando sus propios veedores para organizar sus tejemanejes en las ganaderías y en los apartados. Ya no hay rivalidad en el ruedo. También denuncié la falta de profesionalidad en algunos sectores y la falta de independencia de los mismos; es decir, el empresario debe de ser empresario, no a la vez apoderado o ganadero y viceversa, porque si no todo queda manipulado por unos pocos. Estas son a grandes rasgos, las verdaderas opiniones de mi intervención en este foro y he querido publicarlas para evitar confusiones y manipulaciones erróneas. Debemos tener en cuenta que la fiesta taurina es el segundo espectáculo de masas de España, por lo que entre todos debemos respetarlo y cuidarlo al máximo.