DETALLES DEL FESTEJO
Plaza de Toros Las Ventas
13 Mayo 2011 | Escrito por Juan José Matute. | Fotografías de Constante
Corrida de toros. Toros de Juan Pedro Domecq, correctos de presentación , excepto el anovillado segundo, destacando por encima de todos el que hizo quinto, “Jergoso” de nombre. Los toros lucieron divisa negra en señal de duelo por el fallecimiento de su propietario en un accidente de tráfico hace unos días. Lleno en los tendidos en tarde encapotada.
UCEDA LEAL: Estocada entera, (silencio), estoconazo hasta la bola, (oreja).
JUAN BAUTISTA: Media estocada caída, (silencio) dos pinchazos hondos, y un descabello (pitos).
MORENITO DE ARANDA: Media estocada y tres descabellos, un aviso (silencio). Pinchazo hondo y dos descabellos, un aviso (silencio).
Tercio de varas: Se picó toda la tarde poco y mal, hizo una buena pelea en el caballo el toro nº 94, “Jergoso” de nombre, que derribó dos veces al picador Paco María.
Cuadrillas: Buena lidia de Antoñares al primer toro.
Presidencia: Presidió el festejo D. César Gómez Rodríguez sin complicaciones.
Cuando salieron los carteles de San Isidro 2011 una de las curiosidades que me llamó la atención fue que la corrida de Juan Pedro Domecq no la mataban las llamadas “figurillas”, y me asaltó la duda de qué corrida mandará el ganadero, ya que la mataban tres espadas del montón y no nos decepcionó con un buen toro y otros dos con serias opciones de triunfo.
En el primero de la tarde, Uceda Leal estuvo un poquito desconfiado y nunca se llegó a acoplar con el toro. En el que hizo cuarto le recibió con dos buenas verónicas y una media, el toro galopó en banderillas y Antoñares le colocó dos buenos pares; llegó a la faena de muleta bastante entero ya que no se le había picado y el coletudo le recetó dos series con la derecha y otra con la izquierda y un buen espadazo, cortando la primera oreja de la feria, que seguramente le valdrá para coger alguna sustitución.
Juan Bautista es un torero vulgar, un pegapases del montón, que aburre hasta las ovejas. Con el mejor toro de la tarde, de nombre Jergoso, de 552 kilos, no estuvo a la altura, desbordado en todo momento, dando trapazos por aquí, otro trapazo por este lado ¡Qué sopor de tío!
A Morenito de Aranda nadie le niega las cualidades que tiene. En el primero de su lote actúo más de enfermero, ya que el “torillo”, en cuanto se le sometía un poco, aterrizaba en el suelo; dos series con la mano derecha, ése fue todo su repertorio y el que hizo último del festejo, un toro de más movilidad que el anterior, no me gustó tampoco nada.
Y así transcurrió la cuarta de feria, ni me gustó ni me decepcionó. Paciencia, que nos quedan muchas y seguro que peores.