DETALLES DEL FESTEJO
Plaza de Toros Las Ventas
Primera corrida de toros de la Feria de Otoño. 5 toros de Puerto de San Lorenzo (Encaste Atanasio-Lisardo) y un sobrero de Valdefresno, 3º de Diego Urdiales. Un auténtico desastre de corrida. Baja de presentación, floja, descastada y mansa. Todos pitados en el arrastre. Primero soso y sin clase ninguna; segundo muy protestado de salida, flojo, manso y acobardado; tercero anovillado...y novillo, pues había nacido en octubre del 2011 por lo que tuvo que cumplir los 4 años en la plaza, algunos espectadores le cantaron el “cumpleaños feliz”, cuarto lidiado en 5º lugar largo, sin remate, destartalado y huyendo para dentro, quinto devuelto por inválido, y el sobrero de Valdefresno que le sustituyó inválido y descastado abroncado en el arrastre, y sexto, que después de un brutal choque con el burladero en el primer tercio, se rompió una mano al inicio de la faena de muleta, y hubo de ser pasaportado por López Simón.
Lo visto esta tarde confirma lo que ya percibimos en Mayo. A pesar de que alguna rara vez le salga un toro que nos hace vislumbrar algunas esperanzas, Puerto de San Lorenzo es hoy una reserva de mansos sin clase ni casta alguna.
Diego Urdiales. De tabaco oscuro y oro 1º) Pinchazo echándose fuera, pinchazo y media caída y atravesada SILENCIO. 2º) Estocada contraria PALMITAS Y PITOS AL INTENTAR SALIR A SALUDAR 3º) Espadazo echándose fuera SILENCIO.
López Simón. De azul pavo y oro 1º) Pinchazo y estocada en lo alto OREJA. 2º) Estocada tendida y atravesada OREJA 3º) El toro se rompió una mano al inicio de la faena de muleta.
Presidencia: Don Justo Polo. Discutible si en la primera oreja a López Simón la petición era mayoritaria.
En las cuadrillas, muy mal toda la tarde. Nada que destacar en los del castoreño, y entre los de plata únicamente los buenos pares de Vicente Osuna en el sexto.
Incidencias y otros. Casi lleno, en tarde agradable. Cogida de López Simón en el segundo con el siguiente parte médico “ López Simón sufre herida por asta de toro en el tercio superior cara posterior del muslo izquierdo. Una trayectoria hacia arriba de 12 cm. que alcanza el pubis. Pronóstico reservado
Pocas tardes la afición de Madrid ha acudido a la plaza con más ilusión. En el cartel los dos toreros revelación de la temporada, López Simón con dos puertas grandes en nuestra plaza y el riojano Diego Urdiales que nos emocionó y nos hizo soñar el toreo a los que tuvimos la suerte de verle, hace poco más de un mes en Bilbao.
La tarde comenzaba con aplausos, que mostraban la buena disposición del público. Aplausos a las pancartas reivindicativas que aparecieron en el tendido 7, y aplausos a los toreros que fueron obligados a saludar desde el tercio. Después, el desastre ganadero a punto estuvo de acabar con todas las ilusiones, en una tarde sólo salvada por la entrega y la temeridad de Alberto López Simón, entrega y temeridad que le han valido una nueva Puerta Grande. En el primero de Diego Urdiales, solo podemos destacar, las verónicas de recibo, de mano baja, ganándole terreno y rematando en los medios, y los buenos muletazos de inicio de la faena. La sosería y falta de casta del toro ha impedido cualquier intento de faena. En el anovillado “cumpleañero” lidiado en tercer lugar, ha comenzado con un trasteo muy torero, y, muy molestado en algunos momentos por el viento. Tres muletazos extraordinarios con la derecha y un trincherazo de cartel. Con la izquierda no ha logrado el de Arnedo acoplarse a la descompuesta embestida de su oponente. Escucha algunas palmas tras acabar su labor con una estocada contraria.
Se corrió turno, al estar en la enfermería. López Simón, y se lidió en cuarto lugar el tercer toro del lote de Diego Urdiales. Tras ser devuelto por inválido el toro de la ganadería titular, con el sobrero de Valdefresno, un toro sin clase, ni fuerza ni calidad, el diestro riojano, de nuevo, nada ha podido hacer En su primero, un toro sin recorrido ni clase, y en una faena en la que López Simón ha resultado cogido al iniciar un pase de pecho, el de Barajas ha arrancado una oreja, de dudosa petición mayoritaria, tras una faena ligada y con carga emocional, pero un toreo vulgar, despegado y encimista, y tras pinchar al toro antes de lograr la estocada. Una oreja discutida y que puede explicarse por la urgente necesidad de crear, a cualquier precio, una figura que levante la triste situación de la fiesta. Un torero con la casta y la valentía que ha demostrado este año López Simón no necesita este tipo de orejas que rebajan la categoría de la plaza y la seriedad de la fiesta. El diestro de Barajas, se ha empeñado en salir a la plaza a matar los dos toros que le quedaban muy mermado de facultades, en una decisión muy discutible y, al parecer, contraria a la opinión de los médicos. A favor de un público triunfalista y entregado a la emoción de que el torero herido saliera de la enfermería, ha instrumentado un trasteo que, si exceptuamos una serie con la derecha, y la conmoción por las difíciles condiciones físicas en que se encontraba el diestro, hubiera pasado desapercibido. El público ha pedido la oreja, esta vez sí, de forma mayoritaria, y el presidente la ha concedido, abriendo así una Puerta Grande ganada a base valor, casta, buena gestión de las emociones colectivas y una cierta dosis de inconsciencia. Aun reconociendo su mérito, no soy partidario de que un torero salga a torear mermado de facultades. Ante la gesta del torero herido, todo el reconocimiento y la admiración pero las Puertas Grandes son para otra cosa. El último toro de la tarde, se dañó la mano derecha al inicio de la faena de muleta, por lo que López Simón hubo de limitarse a matarlo con dificultades.