Se lidiaron 6 Novillos de la ganadería de Adelaida Rodríguez, de procedencia Atanasio Fernández línea Lisardo Sánchez. Desiguales de presencia, mansos y descastados, excepto el quinto que trajo algo de casta de la dehesa.
Miguel Maestro: De azul claro y blanco. Estocada caída. Aviso. Después de tres descabellos se echó el novillo. Silencio. Pinchazo, estocada y ocho descabellos tras aviso. Silencio.
Mario Palacios: De rojo pasión y oro. Tres pinchazos saliéndose de la suerte y estocada desprendida y descabello tras aviso. Silencio. Dos pinchazos y estocada caída y trasera. Con este bagaje se le ocurrió salir a saludar al tercio.
Aitor Darío, El Gallo: De lila y oro. Estocada baja. Petición del autobús. Saludos desde el tercio. Pinchazo sin soltar saliéndose de la suerte y estocada casi entera y perpendicular. Se echa el novillo. Silencio.
Presidente: D. Justo Polo Ramos. Dos puntos criticables al presidente, cambió el tercio en el tercero sin haber sido picado y en el cuarto cambió con solo tres palos.
Suerte de varas: 1º Vaporisto. 460 Kg.Negro. En la primera vara salió huyendo del picador al sentir el castigo, se marcho al picador de reserva y el torero de plata que tapaba puerta hizo el D. Tancredo. Aunque la vara fue larga, el picador no se empleó. Manso e inválido. 2º Pintado 464 Kg. Negro. Se agarró arriba el piquero pero le tapó la salida y no dejó ver el juego del novillo en el castigo. En la segunda vara manseó encelándose en el peto. Descastado e inválido. 3º Cabañoso 515 Kg. Negro. Marcó el castigo y se limitó a hacerle la carioca. En la segunda entrada al caballo lo dejó estrellase en el peto. pero no le hizo ni sangre. El presidente cambio el tercio sin picar. En el caballo no se le vio y en la muleta se rajó. 4º Carablanco 516 Kg. Negro. En la primera entrada fue castigado trasero y el novillo se defendió En la segunda vara el picador mostró un deficiente dominio del caballo, solo marcó el castigo. Manso y descastado. 5º Fumado 473 Kg. Negro. El picador le tapó la salida y no lo castigó y en la segunda entrada el novillo cantó la gallina descaradamente, saliendo huyendo del montado. Manso con algo de casta. 6º Forzudo 474 Kg. Negro Bragado meano axiblanco. En la primera vara empujó pero sin clase y el piquero como es línea habitual, le tapó la salida. En la segunda vara se limitó a sujetarlo. Ha cumplido en el caballo y en la muleta el torero no estuvo a la altura.
Cuadrillas y otros: Poco público en la última novillada del ciclo del mes de Julio, donde la temperatura ha dado un respiro a los aficionados de sol. Al finalizar el paseíllo se guardó un minuto de silencio en memoria del ganadero y rejoneador Fermín Bohórquez y del fotógrafo Canito, fallecidos recientemente. Miguel Maestro sustituyó al anunciado, Daniel Menes. En banderillas se lucieron, Fernando Sánchez en el segundo y en el quinto junto con Pedro Lara, ambos tuvieron que desmonterarse. En el tercero se desmonteró Jesús Romero y en el sexto, Ismael Mora. Este último estuvo muy efectivo en la lidia del tercero. La parte negativa la ofreció la cuadrilla de Miguel Maestro en el cuarto, la mala lidia y la colocación de los palitroques dejó en evidencia la profesionalidad de la cuadrilla. Tuvieron que pasar ¡seis veces! para dejar 4 palos. Fue deprimente la actuación de estos toreros de plata. En un momento de la lidia, Julián Maestro, tío del torero, salió apurado de la cara del toro y nadie fue capaz de echarle un capote en el quite. Se libró de la cornada por unos centímetros.
Continúa lloviendo sobre el enfangado coso de la tauromaquia. Las cogidas que se han producido esta temporada en Las Ventas han levantado la polémica en el taurinismo que manda en la fiesta. Algún empresario, con un cártel de dudosa honorabilidad profesional, algún torero que desconozco si ha toreado un toro en puntas en toda su carrera y algún documentado periodista en la nómina de la verdad subjetiva, han tratado de echar leña al fuego poniendo en evidencia la pureza inexistente de la fiesta, de donde ellos son los principales beneficiados, calificando a esta plaza de inhumana en cuanto a la selección del ganado lidiado. Que manojo de sandeces hay que oír, pero siempre buscando el beneficio propio con el mal ajeno. Que cruel es esta fiesta con los que no tienen el amparo de los grandes empresarios. Hay un señor próximo a mi localidad que cuando ve salir un novillo con trapío comenta, ese tiene más cuajo que los toros que mata El Juli. Lo malo no es eso, es que en muchos casos lleva razón. Siempre lo he dicho y lo mantengo, los verdaderos enemigos de la fiesta no están fuera. La novillada de Adelaida Rodríguez defraudo, salvándose de la quema de la mansedumbre el quinto y el sexto, aunque tampoco mostraron un caudal de casta. En el quinto Mario Palacios comenzó la faena con muchas dudas, el novillo metía la cabeza pero había que llevarlo toreado y eso es lo que le faltó al torero cacereño, mostrando con ello la ineficacia de su rodaje. El torero no remató ningún muletazo sacando las bambas de la muleta por debajo de la pala del pitón, los remataba por arriba, dejándose marchar un novillo al desolladero con las orejas puestas. Una pena torero. El primero de su lote debido a la escasez de fuerzas tuvo muy poco recorrido, pero el torero solo sacó de su muleta una serie de posturas no venían a cuento dado el toreo que estaba desarrollando. Si por lo menos hubiera presentado la muleta planchada, los aficionados hubieran comprobado la voluntad de intentar hacer las cosas bien, pero estuvo metiendo el pico en toda la faena, y eso restó peso a su labor. El Gallo en el sexto no entendió a su enemigo. El novillo puso a disposición del torero unas tandas para que triunfara, pero el matador creyó que aquello sería el maná y se dedicó a dar trapazos sin bajarle la mano en ningún muletazo. El animal se fue quedando corto y cuando se dio cuenta se había esfumado la oportunidad de torear, dedicándose a acompañar las embestidas de su enemigo. Al comienzo de la faena al tercero comenzó sometiéndolo por bajo, pero finalizó rematando por arriba. Con la izquierda no se acopló a su enemigo y los muletazos con la derecha no llegaron a los tendidos, aunque el novillo tenía una embestida incierta el torero tampoco consiguió dominar. Su enemigo terminó acudiendo al engaño con la cara alta y el torero dando trapazos. El primero de la tarde, que le correspondió a Miguel Maestro, llegó a la muleta con las fuerzas justas, el torero le recetó una serie de redondos al comienzo de faena con algún detalle en su haber. Al continuar con redondos confundió la cantidad con la calidad, el novillo en cuanto le bajaba la muleta perdía las manos y cuando lo intentó al natural no transmitió ni el novillo ni el torero. En el cuarto lo sacó a los medios y no tuvo fortuna, con ello mostró a los espectadores las carencias y los mantazos. Se le vio desconfiado y la manera de tomar la muleta del extremo del estaquillador, fue la señal de su desconfianza. Cierto que su enemigo llegó a la muleta avisado debido a la nefasta lidia que había recibido.