Presentación del invitado, por Andrés Sánchez
Hoy tenemos el placer de contar con un ganadero que pertenece a una estirpe de ganaderos reconocidos por todos: los Fraile, santo y seña del Campo Charro.
Doña María Cascón, don Juan Luis y don Nicolás Fraile Martín comienzan su andadura como ganaderos de bravo con “El Puerto de San Lorenzo”en 1958, cuando adquieren la ganadería de Doña Mercedes Flores Sánchez, variando el hierro y eliminando todo lo anterior, para añadir ese mismo año 100 vacas de Don Arturo Sánchez y Sánchez y en 1962, 50 vacas de José Infante de la Cámara. Las compras más importantes llegarán en la década de los 70 y los 80, cuando adquieren la mitad de la ganadería de don Lisardo Sánchez y sendos lotes de eralas, añojas y vacas de don Atanasio Fernández, que marcaron claramente el origen de la ganadería.
En 1992, el padre de nuestro invitado, D. Nicolás Fraile Martín, crea la ganadería de “Valdefresno” tras la partición de la ganadería “Puerto de San Lorenzo”, manteniendo la línea de Lisardo y Atanasio en pureza, y en 1996, crea el segundo hierro de la casa, “Fraile Mazas”, de su misma procedencia al formarlo vacas y sementales de Valdefresno. Todo el ganado se encuentra en dos fincas, ambas situadas en Tabera de Abajo, “Tellosancho” y “Valdefresno”.
El debut en Madrid no se hace esperar, la ganadería toma antigüedad en la Feria de San Isidro el 16 de mayo de 1994, tarde en la que los diestros Curro Vázquez y Javier Vázquez cortaron una oreja por coleta. Desde entonces, la ganadería es una de las habituales durante el ciclo isidril.
Pero hablar de Valdefresno en Las Ventas es hablar de Lironcito, cuando aquel 27 de mayo de 1996 se encontró con Enrique Ponce, en la que seguramente sea la mejor faena del torero valenciano en esta plaza por la exigencia y las dificultades de su oponente y la capacidad y entrega que demostró frente a él en lo que es una de las páginas más brillantes en la historia reciente de la plaza.
Prácticamente desde su creación, la ganadería se sitúa en lo más alto y aparece en las principales ferias de toda España y Francia. Entre los hitos más destacados podemos hablar de las 2 Puertas Grandes que ha propiciado la ganadería en Las Ventas, Sebastián Castella en el 2007 y David Mora en el 2012, la corrida lidiada en el año 2002, seguramente la más importante de esta vacada en Madrid y los 4 indultos de la ganadería, entre los que destaca especialmente “Rayito”, indultado por Miguel Tendero en la Monumental de Barcelona en el año 2010 y que ha sido un importante semental para la casa.
En cuanto al encaste, el toro de Atanasio es un toro alto de agujas, aleonado y de caras cerradas, con pelajes negros y, en menor medida, burracos, castaños, colorados y carboneros; mientras que el toro de Lisardo es más bajo, fino, amplio de cara y pelo negro.
Desde la creación de la ganadería, se siguen esas dos mismas líneas y se introduce ganado para refrescar en el año 2008, cuando se adquieren 40 vacas y un semental de la ganadería de D. Javier Pérez-Tabernero, de origen Atanasio Fernández, escogiéndolas de las 170 vacas que formaban la ganadería antes de ser eliminada.
Don Nicolás Fraile fallece en el año 2014 y la ganadería pasa a manos de sus hijos, D. Nicolas y D. José Enrique Fraile Mazas, nuestro invitado de hoy, que continuan el legado de su padre de forma conjunta hasta el año 2020, cuando deciden separar sus caminos. Se divide la ganadería en dos lotes iguales y a Jose Enrique le corresponde la finca “Valdefresno” y el segundo hierro de la casa “Fraile Mazas”, que cambia su denominación a “Jose Enrique Fraile de Valdefresno” y la divisa pasa a ser de dos colores: azul y verde, eliminando el grana que tenía anteriormente.
Comienza así Jose Enrique su andadura en solitario como ganadero con el apoyo incondicional de su mujer y sus 3 hijas, María, Vega y Beatriz, y va poner todo su esfuerzo en defender y llevar a lo más alto el encaste que le apasiona. “Siempre defendí al toro de Atanasio-Lisardo, que me dio el sentido de ser ganadero. No quiero ser uno más, que es lo más fácil, cruzar o meter un encaste mayoritario. Tengo la obligación de mantener este, el que vi toda mi vida.” Decía recientemente en una entrevista.
Uno de los motivos por los que nos acompaña hoy, es el juego que dieron sus toros el pasado 15 de agosto, en la Festividad de la Paloma. Ese día, salieron por chiqueros 6 toros excelentemente presentados, serios, cuajados y astifinos. El juego de las reses fue el clásico del encaste, fríos de salida, aunque cumpliendo todos en el caballo y siempre a más. Destacaron especialmente los jugados en primer, cuarto y quinto lugar, por su prontitud, humillación, recorrido, movilidad y esa transmisión tan propia del encaste. Una corrida importante, para cortar 4 o 5 orejas, que la terna no supo aprovechar en su totalidad y que supuso la reivindicación de un encaste tantas veces criticado, pero que ese día puso de acuerdo a todo el mundo: toreros, profesionales, público, aficionados y ganadero.
Pero como es al invitado a quien todos queremos escuchar, le cedo los trastos, para que nos hable sobre esa corrida, el momento en el que se encuentra la ganadería y las particularidades del encaste que tiene en sus manos.
Muchas gracias.
Bienvenido a la Asociación El Toro de Madrid.
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