Invitados: Luis Miguel Parrado
9ª TERTULIA DE LA ASOCIACION EL TORO DE MADRID (2023-2024)
Lugar: Restaurante, Puerta Grande. C/ Pedro Heredia, 23
Fecha: jueves 22 de febrero de 2024
Invitado: D. Luis Miguel Parrado. Periodista
Presentación del invitado, por Leticia Ortiz
Antes de nada, bienvenido a tu tierra, Luis Miguel. Porque aunque no lo parezca, Luis Miguel Parrado es madrileño. Eso, al menos, dice su partida de nacimiento. Pero, diga lo que diga un papel, él es de Andújar, tierra de toros. Quizá por eso no es difícil imaginarse a un niño que en vez de andar entre balones y porterías, como es lo habitual, prefiere fijarse en el campo bravo. Digo en el campo bravo y no en la Tauromaquia en general, porque a él lo que le interesaba era el toro, el rey de la Fiesta. De aquella época, de cuando apenas tenía 10 años, son sus primeros apuntes taurinos, sus primeras reseñas de los festejos que presenciaba. Unas reseñas que le han acompañado durante toda su vida y que le permiten tener un archivo que es una joya de valor incalculable.
Precisamente, con motivo de esas reseñas, un día recibí un mensaje privado en Twitter, casi cuando el tuitendido -del que aquí hay muchos integrantes- estaba naciendo. Era de Parrado y me pedía un orden de lidia de alguna plaza de Burgos, mi tierra. No recuerdo la plaza, sinceramente, pero es que yo no tengo la memoria del invitado de hoy, perdonadme. No sabéis la sorpresa, y sobre todo la alegría que supuso para mí encontrarme con aquel mensaje que, como no podía ser de otra manera, recibió cumplida contestación. Para mí era un orgullo poder ayudar, aunque fuese de una manera casi anecdótica, al gran Parrado, que era -y es- una referencia y un ejemplo para todos aquellos que juntamos letras de toros. Quién me iba a decir que años después -vamos a dejar la incógnita de cuántos años exactamente porque nos hace mayores-, iba a estar en la Asociación El Toro de Madrid presentando no solo a ese referente del periodismo, sino también ahora a un amigo. La vida… que diría el propio Parrado.
Vuelvo a aquel chaval de las reseñas que, con el toro y el periodismo ya metidos en la sangre como un veneno, empezó en esto desde abajo, forjándose donde el periodismo es más puro… Pero también más duro: los medios locales. Comenzó en la radio allá por 1988 y después se unieron también la prensa y la televisión. Todo en su Andújar del alma. También desde allí solía llamar a El Toreo, el programa taurino de Canal Sur que luego evolucionó en el Carrusel Taurino actual. Y tan interesantes eran sus comentarios en aquellas llamadas que acabaron fichándole como colaborador. Y allí sigue.
Quizá más de uno de los que estáis aquí esta tarde comenzastéis a conocer a Parrado leyendo sus magníficos reportajes ganaderos en 6 Toros 6. Es verdad que también firmó crónicas desde Jaén, Córdoba, Granada, Arnedo o el Sur de Francia, pero aquellas historias del campo bravo que parecía que solo él sabía eran, para muchos, el mayor atractivo de la revista. Aún se sigue hablando hoy en día de alguno de esos reportajes…Como por ejemplo, la despedida de un ganadero legendario al que aquí tenéis especial aprecio, don Fernando Cuadri. Fue él quien lo contó en primicia.
También nos regaló sus pinceladas de sabiduría en aquella locura maravillosa capitaneada por Alfredo Casas que se llamó La Fiesta y que duró demasiado poco para la calidad que tenía. Lástima. Así está un mundo que se permite tener en el banquillo a los mejores mientras regala demasiado sitio a los mediocres.
Su voz sonó también en Radio Nacional, en Clarín, tanto en la época de Rodríguez Montesinos como cuando lo dirigían Teo Sánchez y Enrique Mazas. Y, en este escenario, no me puedo olvidar, claro, de ‘Los caminos del toro’, un blog del que muchos seguro que fuistéis ávidos lectores. Un blog nacido por su inmensa afición, sin ninguna pretensión más allá de la de contar aquellas historias del campo bravo que no debían caer en el olvido y que Parrado domina como nadie. Igual un día decide retomarlo. O eso, al menos, nos gustaría a muchos. Como el libro que nos debe a los aficionados. Quizá un día...
Y así llegamos al programa ‘Por las Rutas del Toro’, un nombre, por cierto, que nunca le convenció. Luego, si surge el tema, que lo cuente él y diga si había un nombre alternativo. Planos cuidadísimos, aquellas imágenes de dron que te hacían agacharte en casa cuando la cámara pasaba entre las patas de un toro, una tertulia para paladear despacito e ir tomando notas… Y todo impregnado por la sabiduría y el conocimiento que el protagonista de esta tertulia atesora. Un programa de culto para aquellos que amamos la Fiesta. Un programa que, además, ganó fama de buen bajío entre los ganaderos: camada que quedaba registrada en la cámara, camada que tenía algún toro de bandera. Nos lo quitaron, creo, demasiado pronto, coincidiendo con el adiós de Movistar Toros. Y, al menos de momento, One Toro no ha llamado a la puerta para recuperarlo. Y es una pena. Lo digo objetivamente, dejando la amistad a un lado, como aficionada y como profesional de los medios. La calidad no sobra nunca en un canal especializado. Al revés. Debería ser siempre santo y seña. Ojalá un día suene el telefóno y ese ‘Por las Rutas del Toro’, o como Parrado quiera llamarlo, vuelva a la parrilla televisiva.
En ese programa, como en todo su trabajo, se transmitía la pasión de Parrado por el toro. Como ese duende que tienen algunos toreros, y no sabemos de dónde viene, en esto del periodismo los tocados por la varitaademás de tener sabiduría, saben transmitir sus conocimientos con pasión. Y Luismi -ahora sí, ahora cuando ya llego al final de esta presentación, permitidme y permíteme tú también, que te llame Luismi- tiene esa pasión que es imposible de aprender, esa que sale de dentro cuando se habla de aquello que se ama. Una pasión que también se le nota en los ojos, aunque de otra manera, cuando habla de ese gran motor de su vida que es su familia, especialmente esas dos niñas que, aunque ya no son tan niñas, para él siempre lo serán, como para cualquier padre.
Una pasión que también le brilla en los ojos cuando descuenta los días que quedan para el Jueves Santo -solo quedan 31, Luismi-, porque será entonces cuando volverá a ceñirse su túnica nazarena para completar la estación de Penitencia con su Cristo de la Sentencia, y sobre todo, con su Virgen del Buen Remedio. En su Andújar del alma, claro.
Y ahora sí, os dejo con un referente para los aficionados, un ejemplo para los periodistas que van por el camino recto, una enciclopedia del campo bravo… Y sobre todo, os dejo con un amigo. Porque la vida a veces te hace regalos, y a mí me lo hizo cuando alguien a quien admiraba -y admiro- tanto como a Luismi me permitió llamarle amigo.
Exprimidlo porque tiene mucho que contar. Eso sí, no le preguntéis de fútbol para no sacarle los colores, aunque algunos le llamaron el Maldini de los toros. Miren, seamos serios, en todo caso, Julio Maldonado, Maldini, sería el Parrado del fútbol. Y sobre todo, sobre todo, os pido que lo cudéis bien, porque además del gran profesional que ya os he contado que es, es tela de buena gente y se lo merece todo.
¡Tertulia con faena de Puerta Grande!
Buena tertulia y espero que los presentes tuvieran las mismas sensaciones. Conocía a Parrado de referencias y nunca imaginé que sus conocimientos llegaran al nivel mostrado. Hay una frase de nuestro inolvidable Monfil, que decía: ”Me gustaría ver a Morante torear de capote desde la barrera de contraquerencias hasta toriles, y una vez allí, ejecutar la suerte suprema. Al hilo de esto y a mi entender, en la tertulia de anoche,salvo las presentaciones, sobraron las preguntas, hecho que hubiera permitiendo a nuestro invitado sacar a la luz todo lo que encierra su mente prodigiosa sin el corsé de las cuestiones. Mostró claridad, técnica y hondura en sus manifestaciones. Eso solo se consigue con una afición en la dirección adecuada en defensa de la fiesta. Creí saber un poquito de esto, pero anoche, este AFICIONADO, me sacó los colores y consiguió que los presentes disfrutaran escuchándole a la vez que me demostraba que no tengo “ni idea”de lo que encierra este mundo apasionante que es, LA FIESTA DE LOS TOROS!
Fue nuestro presidente el que barrió plaza e hizo callar los móviles para pasar a informar de las actividades de nuestra Asociación, destacando una nota luctuosa por el fallecimiento del torero Emilio Oliva y el escritor Fernando Claramunt, D. E. P., continuando con el anuncio que el día 21 de marzo será la entrega de premios, con elagradecimiento a distinto medios de comunicación su interés por la fiesta y haciendo una valoración crítica de la subvención que la Comunidad de Madrid ha estado repartiendo a las distintas asociaciones y que este año va a recaer en La Fundación del Toro de Lidia, agradeciendo este hecho al director de Asuntos Taurinos de la C. de Madrid, Miguel Abellán. Gracias D. Miguel en deferencia por el detalle, añado. A continuación cedió la palabra a la periodista Leticia Ortiz la cual hizo la presentación de nuestro invitado a través de la lectura de unas notas, donde destacaron que nació en Andújar y que con solo 10 años comenzó a fijar su atención en el campo bravo haciendo reseñas de todo aquello que se presentaba ante su mirada y relacionado con el campo bravo. En el año 1.988 inició su andadura en la radio, continuando con otras colaboraciones, borrando del panorama periodístico, con un tono de calidad, a los que llenaban de mediocridad los medios de comunicación, siendo un referente para los que nos dedicamos a juntar palabras escribiendo de toros. También añadió unos remates pintureros a una faena maestra de periodista forjada en sus años de profesión. ¡MUY BIEN LETICIA!
Cuando Parrado comenzó su andadura dialéctica en la tertulia, la primera “perla”que soltó fue, “que era un honor estar junto a los que admira como aficionados y tienen al toro como ejemplo de pureza y defensa de la fiesta”. Menuda frasecita. Creo que los aficionados no pueden pedir un halago más sincero. A continuación vinieron las preguntas y respuestas, siendo Roberto el que le preguntó cómo nació su afición, reconociendo nuestro invitado que su padre era agricultor, y que su afición fue tomando cuerpo tomando notas de los eventos taurinos que acudía, pero sin recordar como comenzó esta andadura en su vida. “Esto tiene algo que te atrapa y no te suelta” añadió, y fue en Andújar donde comenzó “su carrera”, una zona lde ganado bravo donde destacaban las Ganaderías de Samuel Flores y Román Sorando y lindando con la finca Los Alcornoques, de Samuel Flores, recordando un tentadero a cargo del torero Ortega Cano acompañado por su mozo de estoques Rafael Corbelle, en alusión a que hoy cuando un torero acude a tentar suele acompañarlo un equipo y hasta el director del hotel donde se hospede. Los tiempos cambian, añado. Dio una serie de ganaderías de su gusto como es la de Sepúlveda narrando la historia de Pitanguito, toro que estuvo de sobrero en Las Ventas y al no ser lidiado retornó a la ganadería y el ganadero lo quiso lidiar en Andújar, donde se acartelaba Enrique Ponce, pero al pelearse con otro toro, Samuel Flores lo llevó de nuevo a la finca y lo empleó como semental. El primer toro hijo de Pitanguito fue lidiado en Úbeda y lo indultó Enrique Ponce. ¡Curiosidades de la vida y de los que disfrutamos de ella. De cine!
Roberto habló sobre los veedores que llevan tiempo en Las Ventas, respondió Parrado que ahora puede que se paguen los afectos de la pandemia ya que durante esta etapa muchas ganaderías fueron esquilmadas, causando un déficit de ganado en las dehesas. Antes de la pandemia los ganaderos que eran contratados en Madrid tenían preparados 15 o 20 toros para elegir una corrida, ahora no ocurre y esa es la causa de que se estén lidiando corridas con ganado de dos ganaderías o tres ganaderías, con el nombre de desafíos ganaderos. Añadió que Sepúlveda y Monteviejo, esta con una novillada, vendrán este año a Madrid. La pregunta de Rosco fue dirigida a que el periodismo está en desuso, como también denunció que hay ganaderías que lidian en la feria dos tardes, señal de lo que les espera a los aficionados. Contestó nuestro invitado que le parece bien la repetición de ganaderías dadas las circunstancias anteriores de la pandemia, y sobre el futuro de la fiesta, hay que ponerse en la piel de todos, el problema es que están buscando el jolgorio del público y con ello esconder la verdad de la fiesta. Sobre Las Ventas siente vergüenza la utilización que le están dando con el vodevil irrespetuoso de la música y el alcohol.
Sobre los indultos, hizo unos comentarios del toro Macedor, lidiado en Las Ventas en la corrida de la Prenda de 1.979, un toro de Cortijoliva, devuelto durante la lidia y en lugar de ser sacrificado en los corrales de la plaza, se le perdona la vida por una petición que le hizo el ganadero al entonces rey, Juan Carlos, presente en una barrera de la palza. Al toro se le perdona la vida en los corrales, considerándose el primer toro indultado en las Ventas. Sobre Belador, el toro indultado en el año 1.982 en Las Ventas, fue criado por una vaca mansa al ser desechado por su madre. Carlos solicita a Parrado, que le indique 3 cronistas a seguir, a lo que le contestó, Fernando Carrasco, Charo de ABC, Paco Aguado, Vicente Zabala, Carlos Crivell. Antonio Lorca… A Carlos Illán lo lee menos. Expresó sus preferencias sobre la casta vazqueña y la diversidad de encastes y criticó a los ganaderos que no comparten su encaste, por ejemplo la de Prieto de la Cal, sacando a colación el caso de Juan Pedro Domecq y Santa Coloma. Que sería del campo bravo si estos ganaderos no hubiera compartido su ganado. También destaco a unos ganaderos modestos de Jaén que tienen ganado de Barcial, los famosos “Patas Blancas”, la labor periodística de José de la Cal, creador de la famosa frase: “Los toros exponen en la plaza las mentiras de los ganaderos”, refiriéndose a los cruces que muchos de ellos hacen en sus ganaderías y que luego ocultan. Añadiendo que en el campo hay muchas verdades pero también mentiras, sacando a relucir muchas anécdotas que fueron apareciendo en la tarde/noche.
Roberto le recuerda que Joaquín López del Ramo nos ha echado en cara que el comportamiento de la afición de Madrid se ha “cargado” algunas ganaderías, no estando nuestro invitado de acuerdo con esos comentarios. Recuerda que Antonio Pérez, de San Fernando, ganadero de los famosos “AP”, fue el culpable que muchas ganaderías se hundiera en los años sesenta, acuñando la frase “el toro tenía que ser torito y sin freno”, lo que los aficionados llaman el “burritoro”, añado. Sobre el Batán lo considera una aberración su desaparición. Era una muestra muy gratificante para los madrileños y de esos manifiestos han nacido muchos aficionados. Destacó al ganadero Victoriano del Rio, que ha logrado un toro con trapío y que embista, y que le gusta mucho esta ganadería, pero también aportó que muchos de ellos ocultan sus verdades, y en este caso, el de Guadalix de la Sierra defiende que Aldeano, creador de su ganadería, no tenía sangre Murube, y respecto a los Bayones, “As meigas, haberlas, hainas”. También ha negado el ganadero que nunca adquirió ganado de D. Abilio, origen Atanasio. Sobre la compra de Aldeano a Luis Algarra, tuvo mucha influencia El Vito. También destacó al ganadero de Rehuelga, que alimentó con pienso a su ganado desde erales. Juan Pedro Domecq media los pitones de sus toros y rechazaba al que no daba las medidas que élconsideraba. También Conradi, el propietario de La Quinta, empleaba este sistema. Salió a la palestra el toro Mangarrota, semental de Las Ramblas y otras anécdotas que sirvieron para llenar de silencio la sala donde nos encontrábamos.
La despedida de Fernando Cuadri le emocionó, sobre todo cuando vio la pancarta que los aficionados del 7 le dedicaron al ganadero de Comeuñas. Le plantearon la situación del campo, respondiendo que lo que realmente remata a los toros es el pienso y no la hierba y lo que les perjudican son los viajes y los toros rechazados en los reconocimientos en las plazas los tratan como secretos de estado, destacando a Madrid, Sevilla y Bilbao. Por su lado, Yolanda admiró la capacidad del ponente, exponiendo que los pastores de bravo van a la contra y el periodismo influye en gran medida de la situación de la fiesta, ya que no critican nunca la aptitud pasiva del torero y abogan por la confusión mezclando cuando un animal repite o que embista, son dos conceptos muy distintos. Es la diferencia entre un toro encastado y un animal casi inofensivo, añadiendo el periodista que el toro es el último “mono”, y que si hablara, la fiesta tomaría otro cariz y si el que habla es el ganadero se tendría que comer sus camadas con patatas. Respecto a la suerte de varas, hizo un recordatorio de la ganadería Los Bayones. Le gustaba esta ganadería porque sus toros empujaban en el caballo metiendo los riñones, pero hoy son otros tiempos que nadie intenta cambiar. Respecto a las fundas comentó que está de acuerdo con ellas, pero no con las consecuencias que puedan arrastrar. Que cada uno saque sus propias consecuencias, añado. Es una operación que debería ser vigilada por la autoridad. Los efectos del afeitado se los atribuyen al ganadero, sin embargo sus beneficios son para el torero y en lugar de sancionar a los ganaderos deberían hacerlo a todos los que participen en la selección del ganado en la plaza. Calificando el problema sin voluntad de solución. Expuso también que en plazas de menos relevancia los presidentes algunos son amigos de los organizadores de los festejos. Individuos que desconocen las elementales reglas del reglamento taurino.
Cristina preguntó que experiencias le ha dejado su profesión. Destacó Parrado que le gustó mucho por las rutas del toro de Joaquín López del Ramo, de las que contó algunas anécdotas, unas positivas y otras no tanto, que le marcaron en su vida. Le vino a la mente la ganadería de El Parralejo para la cual tuvo halagos. Julián le planteó el problema de la corrupción, a lo que Parrado hizo alusión a una frase atribuida al filósofo Ortega, que dijo: “Si quieres conocer la situación de España, asómate a una plaza de toros”. Sobre los indultos, comentó un caso ocurrido al ganadero Santiago Domecq. Le indultaron un toro en la provincia de Murcia y el ganadero no lo dejó como semental. Añadió que hay casos que los toreros muestran tener mucha cara, inculcan con un gestos al publico ignorante sobre el indulto de un toro que solo ha mostrado bondad y repitiendo en la muleta, pero buscando el no correr riesgos entrando a matar. “Menuda cara” Añado. Comentó que, a su criterio, el ganado de Cuadri tiene muy poco de Santa Coloma y si de Urcola, al que considera como encaste propio. Sobre la variedad destacó a Cuadri, Ana Romero, Santiago Domecq y en otra época le gustaba mucho Torrestrella y tambiénNúñez del Cubillo, pero ante esta preferencia comentó que muchos de los presentes no pensarían lo mismo. Dicho queda.
Sobre la oscuridad de la fiesta acuñó una frase la cual destaco, ya que me gustó mucho. Dijo: “Si los camioneros y mayorales hablaran…” Sobre los comentarios del posible refrescamiento de la ganadería del Partido de Resina, cree que no se ha refrescado con otra sangre. Salió el tema del dinero, tabú entre la jerarquía del taurinismo, fue el único punto que dio un pasito atrás, pero terminó cargando la suerte, indicando que Pamplona paga mejor que Madrid, dejando entrever que entre 150.000 y 200.000 € por corrida, si no entendí mal. Sobre la eliminación de los sorteos, mostró su desacuerdo. En la Comunidad de Andalucía, ya se están llevando a cabo, considerándolo como otro punto a añadir en la debilitación de los cimientos de la fiesta. Sobre que una figura no abra cartel siempre ha existido, eligiendo como primero a una figura pasada de tiempo, pero lo que cada día está más fuerte es la unión que hay entre ellos en procurar no hacerse dañoen la arena, desvirtuando con ello la fiesta al desaparecer la competencia. Sacó a relucir la ganadería de Guadalmena, como reconocimiento a su Jaén ganadero. Sobre su etapa de veedor y que lo fue de Serolo, fue una broma que le gastaron el día de los inocentes, pero de su relación con Curro Vázquez, lo negó rotundamente.
Lo que no pudimos negar es que el ponente no se cansaba de ofrecer datos y los presentes con los oídos prestos escuchándolos, pero nos estábamos pasando de faena y había que dejarlo, aunque fuera de manera remolona fuimos abandonando el local que nos ofrece el Restaurante Puerta Grande, ya que tertulias como la vivida no suelen repetirse con frecuencia. Pero todos los presentes fuimos capaces de lidiar ese toro encastado que es la comunicación y si va acompañado de la verdad, tanto por parte del ponente como de los oyentes, no hay quien se resista a olvidarse del tiempo.
Pepeíllo, miembro de la Asociación el Toro de Madrid.
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